La Disfasia es un problema grave del lenguaje que se caracteriza por trastornos en la expresión y en la comprensión del lenguaje ya adquirido. Se considera una alteración grave que puede llevar al niñ@ a sustituir las palabras por un lenguaje de gestos y muecas.

Algunas de las características de los niñ@s que padecen Disfasia es que hacen un uso muy pobre del vocabulario para su edad, utilizan de forma incorrecta las formas gramaticales y los pronombres personales, organizan y estructuran mal las frases, utilizan los verbos en infinitivo y presentan problemas de memoria y repetición. Además, existen otros síntomas más particulares como los problemas para identificar el espacio y el tiempo, déficit de atención, falta de discriminación auditiva, alteraciones en el ritmo del habla, complicaciones psicomotoras, etc.

En la mayoría de los casos, la Disfasia puede estar originada por lesiones cerebrales, falta de oxígeno durante el parto (Hipoxia), enfermedades que afectan al sistema nervioso central (meningitis) y hospitalizaciones que se alarguen en el tiempo.

Tenemos que estar alerta, conociendo bien la sintomatología de esta patología, para no confundir el diagnóstico con casos de Autismo o Asperger. Además, debemos estar alerta para  evitar que pase desapercibido y provoque consecuencias graves como el aislamiento social del niño, fracaso escolar o trastornos emocionales y afectivos, que son frecuentes en estos casos.

En cuanto detectemos (tanto padres como maestros) que algo no funciona bien, debemos buscar un logopeda para que mediante distintos ejercicios y actividades rehabilite las áreas del lenguaje que se encuentran afectadas. El logopeda identificará los procesos más alterados, así como los que se mantienen intactos, y en base a ello, construirá un tratamiento individualizado (hecho a medida de las necesidades del paciente). Durante el tratamiento logopédico, se ejercitará la musculatura orofacial para mejorar el tono y la movilidad muscular y producir una mejora notable en la articulación de los fonemas, se realizarán actividades de ampliación y fijación de vocabulario, de la memoria, de discriminación auditiva, etc. El apoyo temprano del logopeda, unido al esfuerzo de la familia, es absolutamente vital para mejorar las alteraciones de la Disfasia.

Uno de los recursos que se utilizan en estos casos, son los sistemas de comunicación alternativa y aumentativa. No se utilizan como último recurso frente al fracaso del habla como vía de comunicación, sino que también favorecen y apoyan la aparición o mejoría del lenguaje oral en muchos casos, además de servir de apoyo comunicativo hasta que se consiga el habla.